Alejandra Kolontai: BOLCHEVIQUE ENAMORADA

 

En los años finales de  1970, en los albores de la Transición, surgen diferentes organizaciones feministas de orientación variada. También se abrieron librerías y se pusieron en marcha editoriales. Me tocó cubrir para mi periódico de entonces numerosas reuniones,  incluso un Congreso en León. Creo que fue ahí, en un puesto (más bien una mesa) que había instalado LaSal, una editorial feminista catalana, donde compré la novela La bolchevique enamorada de Alejandra Kolontay, Esta, además, se basaba en la de Ediciones Oriente, una de las más importantes iniciativas culturales republicanas surgidas durante la dictadura de Primo de Rivera. Esta última editorial, por ejemplo, publicó obras de Miguel Ángel Asturias, Ramón Gómez de la Serna o Andre Gide.

Alejandra Kolontai nació en San Petersburgo en 1872 en el seno de una familia acomodada y liberal. Desde muy joven se interesó por el marxismo, estudiando Historia del Trabajo en Zúrich. En 1899 se afilió al Partido Obrero Socialdemócrata Ruso. Tras la publicación de su artículo Finlandia y el socialismo , sufrió el exilio. Ello no le impidió su participación en los acontecimientos revolucionarios de 1905 y, tras el triunfo de la Revolución de Octubre de 1917, regresó a Rusia donde fue elegida miembro del Comité Ejecutivo del Soviet de Petrogrado. Formó parte de sector femenino de Partido Bolchevique, siendo la primera mujer que participó en un gobierno y también la primera mujer embajadora de la historia. Por cierto, estando de embajadora en México, protagonizó una curiosa anécdota. Se organizó un banquete en su honor en un domicilio privado. Alguien llamó a la Policía para denunciar que, en aquella casa, se estaba produciendo una reunión clandestina de católicos. Llegaron los agentes y se llevaron a todos detenidos.

Pero si por algo destacó fue por su aportación teórica y práctica a lo que ella llamaba "la lucha inseparable por el socialismo y la igualdad de la mujer". Hay, sin embargo, gentes que aseguran que  Kolontai "luchó por el comunismo y por tanto por la emancipación de las mujeres trabajadoras, no por el feminismo". La mayor parte de sus obras son ensayos:  La emancipación de la mujer, Sociedad y maternidad y La clase obrera y la nueva moral. Sin embargo, yo solo he leído La bolchevique enamorada que es, sobre todo, una curiosidad.

La enamorada es Vassilissa, una joven bolchevique de gran rectitud moral que se enamora perdidamente de Volodya, un atractivo anarquista. Inician una bonita pero también tormentosa relación en la que el amor se entremezcla continuamente con el compromiso por su pueblo. Al igual que  Kolontai, la protagonista de esta novela se entrega totalmente a la causa revolucionaria rusa y a la lucha feminista. En palabras de la autora, «esta novela no es ni un estudio «ético» ni un cuadro de la vida de la rusa soviética. Es puramente un estudio psicológico de las relaciones sexuales del período de la posguerra. Muchos de los problemas que presento no son exclusivos de la Rusia soviética. (…) Mi intención al escribir este libro es que sirva, aunque sea poco, para combatir la vieja hipocresía burguesa de los valores morales y para demostrar una vez más que empezamos a respetar a la mujer, no por su «moral buena», sino por su actuación, por su sinceridad, con respecto a los deberes de su clase, de su país y de la Humanidad en general».

Murió en Moscú en 1952.